Articulo

Miradas del cine independiente turco

Miradas del cine independiente turco

Repaso a la actualidad de Turquía a través de su cine documental más comprometido

Por Julio Moreno




El propósito de este articulo es situar al lector en un país como Turquía, dentro de su mapa político, económico y social, a través de una herramienta dinámica como solo el cine independiente y comprometido es capaz de sacar a relucir. Por tanto, el enfoque que se apunta está apartado del frente en que se mueve el cine mas comercial, que por otra parte ha estado tan arraigado en la cultura cinematográfica Turca desde los años 70.

Dejando al margen los avatares políticos de Turquía en las ultimas décadas, este es, sin embargo, un país que ha aprendido a reinventarse continuamente, ya desde la instauración de la república con Atartuk, de la que es heredero en muchos aspectos. La actual sociedad turca es el resultado de las fuerzas ocultas tras el cambio de poderes políticos, y por consiguiente de los efectos que ello ha conllevado. Estamos ante un mapa de una sociedad dividida entre la tradición y la modernidad; la religión y el laicismo; el pasado esplendoroso y un presente dinámico; la dicotomia entre la gran ciudad, con sus paradojas y contradicciones, y la vida de provincias, situada en la coordenada de lo rural y el origen de la vida en sociedad.

Así pues, la intención de este artículo es mostrar una radiografía de lo dicho anterioriormene, a través de varias películas documentales de reciente creación realizadas por jóvenes cineastas turcos. De unas obras cuya narrativa se encuentra más cercana al activismo político que de las convenciones que rigen el cine comercial de base, una narrativa de orientación colaborativa que alude a unos contextos llenos de especificidad, en tanto que da voz a unas identidades hasta hace poco silenciadas por la clase política y los valores dominantes.


Feminismo y comunidad

Una obra de teatro representada por un grupo de mujeres sirve de base narrativa en "Oyun" (2005) de Pelin Esmer, en donde las mujeres de un pueblo situado en las montañas al Sur de Turquía se reúnen, trabajan y crean una obra de teatro basada en sus propias vidas.

Todo empieza cuando un buen día, un grupo de ellas deciden hablar con el profesor de la escuela local y le proponen por propia iniciativa la posibilidad de hacer dicha obra, que a partir de ese momnento contará con la ayuda del profesor, que ejercerá como guía en todo momento hasta el día de su representación. Durante ese periplo no solo vemos cómo la obra va tomando forma sino que asistimos a diferentes capítulos de la vida diaria de cada una de las mujeres, conociendo sus frustraciones y anhelos por una vida mejor, sus niveles de relación dentro del seno familiar y conyugal, sus obligaciones y diferencias con los hombres... En una escena, una de las mujeres nos revela delante de su marido como este le pega ocasionalmente como si de algo normal se tratase; otra mujer se queja de la desigualdad habida en el reparto de tareas domesticas y del sostenimiento del hogar familiar en general.

El vaso conductor de todo ello es el profesor de la comunidad donde estas mujeres viven. Este hombre no solo les ayuda a representar una obra, sino que con ello les brinda la posibilidad de exponer sus problemas y frustraciones más cotidianas. Por su parte, la representación no deja de ser atípica, ya que sus intérpretes están doblemente representadas: la obra de teatro es una liberación para estas mujeres así como una forma pedagógica de afrontar los problemas reales a su comunidad, de confrontarlos ante ellas mismas y ante el resto. Al final, con lo que se queda uno como espectador son las duras condiciones de vida de unas mujeres que luchan por una vida mejor para el futuro de próximas generaciones.

El acercamiento narrativo de Pelin Esmer es, ciertamente, contra normativo en su planteamiento y singular tratamiento de las imágenes que representan la vida rural de estas mujeres. Su visión tiene claros alegatos feministas y, sin duda, sirve de reflejo de una realidad no tan lejana en el tiempo.


Por su parte, en "Sov Mevsim Savaklar" (2009), el realizador kurdo Kazim Öz pone el punto de mira de su cámara en la vida de la comunidad nómada Shawak, situada al Este de Turquía, explorando con acierto poético no solo los hermosos paisajes por los que discurre la caravana de estos últimos trashumantes, sino el devenir de lo cotidiano basado en unos rígidos códigos de conducta y responsabilidades individuales. Esta película, a caballo entre lo documental y lo etnográfico, trata de dejar constancia de una tradición milenaria en peligro de desaparición, en donde la dureza de las condiciones de un oficio y las tentaciones de la vida moderna son mas fuertes que la propia tradición de aquellos que la sostienen. Esto queda patente en la joven músico que sueña con el día en el que pueda ganarse la vida con su instrumento y no tener que continuar con una tradición que, aunque ama por el sentimiento de libertad que le produce, no desea continuar debido a las duras condiciones físicas y de aislamiento del resto de la civilización que ello conlleva.

El ojo de Kazim Öz se inmiscuye dentro de las relaciones de la pequeña comunidad trashumante, intentando descubrir las fuerzas internas por las que se rige, mostrándonos un modelo asentado en valores pronunciadamente  masculinos, donde la mujer destaca por su capacidad de trabajo pero cuya reivindicación de unos mayores derechos de decisión dentro de la comunidad se pone entredicho por los propios hombres.

La belleza de unos paisajes y la nobleza de una tradición es contrastada con el cruel destino final del matadero, para unas ovejas que son la razón y sentido de aquella; hay aquí pues una especie de compasión humana del director, del dolor recibido por la perdida de parte de esa belleza en su conjunto.


Feminismo y liberación sexual

La directora Melisa Önel nos acerca al retrato de Esmeray, activista feminista y actriz de origen Kurdo que reflexiona sobre las dificultades de vivir en una sociedad que no comprende la transexualidad. Sin duda, "Ben ve Nuri Bala" (2009) es una pelicula valiente, contestataria y participativa, que nos conduce hasta la búsqueda y análisis de los elementos que juegan un papel decisivo en la conformación de aquello que llamamos género.

La protagonista nos da las claves para su disección, a través de la mirada de la cámara, que se cuela en su vida plena de cotidianidad. Los diferentes episodios se suceden: la Esmeray actriz que utiliza el monólogo más sarcástico para descuartizar a una sociedad que ignora y denosta al casi invisible y estigmatizado colectivo transexual; el paseo en coche por las áreas rojas donde Esmeray solía ejercer la prostitución, dando buena cuenta del origen que subyace detrás del incomprendido y marginado individuo transexual, que comienza con un rechazo frontal y amargo dentro del seno familiar...

El proceso de normalización interior llevado a cabo por esta singular mujer queda materializado en las imágenes que la sitúan en su casa, ese espacio que es la república intima de cada uno de nosotros. De esta manera, "Ben ve Nuri Bala" es un ejemplo narrativo de una directora que no tiene reparos en enfrentarse a un tema hasta ahora tabú en la sociedad turca, la muestra de que un cine de marcado activismo político es tan posible como necesario en la Turquía de hoy.


Derecho laboral  y social

"Gundelikci" (2006) es otro ejemplo de obra en donde la reivindicación de los derechos laborales y sociales mas elementales es la apuesta narrativa de una cinta sin pretensiones visuales. Su director, Emel Celebi, trata el tema del servicio domestico en la gran ciudad, haciendo una radiografía de un sector laboral cuyos resultados son tonos de marginalidad y una estructura ciertamente desregularizada.

Con un estilo mas cercano al reportaje que al documental, "Gundelikci" ofrece a través de varios testimonios de mujeres una idea de un colectivo necesario en la gran urbe, la prueba de que la procedencia de las personas que lo comprenden es predominantemente kurda, y como el papel de la asistencia domestica o del hogar ha sido identificado y asimilado por una comunidad que no tiene muchas más opciones de supervivencia. En cualquier caso, estamos ante un trabajo que solo pretende informar, dando a conocer una realidad social y laboral a través de un pequeño elenco de personas, por lo que el resultado final es sobrio y sin emoción, en un estilo reportaje que no deja ir mas allá.


Emigración y ordenación urbanística

Los tres siguientes filmes tratan desde diferentes contextos un mismo tema, el de la emigración y la ordenación urbanística en la megalópolis de Estambul.

"2 Eylul Dinerisi" (1977) es un documento histórico de los años 70, en donde se muestra el derrumbe por parte de las autoridades estambulíes de uno de los poblados de chabolas más grandes de la ciudad, así como el enfrentamiento habido entre las fuerzas de seguridad y sus habitantes durante el mismo. Es un documento amargo, fiel al estilo verité , sin mas pretensiones que dejar con estricto rigor la constancia de unos hechos donde destaca la impunidad y prepotencia de los que poseen el poder. En síntesis, es el primer film turco en dar buena cuenta del problema que arrastra Estambul desde entonces.

"Selahattin´in Istanbul´u" (2010) es un film heredero del tema anterior pero expuesto desde la actualidad, en donde los estratégicos y a menudo salvajes planes de renovación urbanística han dibujado un nuevo mapa de la ciudad de Estambul. Así pues, esta modesta pelicula documental da a conocer, a través de Selahattin, su protagonista, los efectos de dicha renovación en los ciudadanos Estambulies. En ella, Selahattin es un hombre que, al igual que muchas otras familias, ha sido desplazado sin otras opciones hasta los bordes de la periferia de la gran ciudad. Su día a día nos hace comprender la insatisfacción y angustia que le produce el estar lejos del viejo barrio de Sulukule, donde convivía de cerca con su propia cultura. Incapaz de identificar y asimilar el cambio, Selahattin busca una solución para volver al lugar y así reencontrarse consigo mismo. Con un planteamiento sencillo, sin mas pretensión que recoger los inconvenientes que aquél encuentra en su camino, esta es una obra más próxima al reportaje que al documental, pero sin por ello estar despojada del sentido de necesidad que este tipo de documentos albergan.

La siguiente y ultima pelicula documental que paso a comentar es "Ekumenopolis: ciudad sin limites" (2011), del realizador y activista político Imre Azem, el cual aborda con gran destreza y reflexión el tema de la renovación urbanística en Estambul. Ganadora del premio de derechos humanos en el pasado festival de cine de Sarajevo, es un rico y solido documental, primero en ser incluido en el prestigioso festival de cine de Estambul. Un film que reúne a expertos, escritores, autoridades, empresarios, responsables de comunidades de diferentes distritos de la ciudad y otros actores validos, con objeto de analizar los actuales efectos de planes urbanísticos, recalificaciones de suelo y otras políticas llevadas a cabo por la administración.

El realizador turco comienza indagando en el contexto político y económico que sirve para establecer las causas de dichos efectos, precedido de una magnífica introducción histórica sobre la construcción de la ciudad de Estambul desde el siglo pasado, a través de una creativa animación ciertamente pedagógica. El filme prosigue con otro controvertido asunto, y que ya aparece como futuro símbolo de la ciudad, la construcción del tercer puente sobre el Bósforo.

El realizador, mas allá de dar una visión personal, se ocupa en ofrecer con datos e información objetivas una inequívoca y nefasta realidad acerca del nuevo mapa urbanístico de Estambul, una realidad caracterizada por la deslocalización de barrios enteros, conllevando dolor y marginalidad para muchas familias, como la que sigue de cerca el joven realizador en pos de reivindicar sus derechos y denunciar las falsas promesas. Una deslocalizacion sustituida por nuevas áreas destinadas a albergar nuevas urbanizaciones blindadas o grandes centros comerciales y de ocio, causando con ello un mayor impacto ecológico e incrementando la división social.

La causa principal que se argumenta como responsable de este nuevo paisaje urbano es el voraz apetito de grandes inversores a escala internacional, que cuentan con el beneplácito de las autoridades, donde el marco imperante es el llamado urbanismo capitalista neoliberal. A lo largo de más de un año, Imre Azem trabajó con un equipo reducido, filmando él mismo los recovecos de la gran ciudad y construyendo así un film cuyo resultado es inquietante, brillante y demoledor.


Tras este breve recorrido por varios títulos del cine documental independiente turco, podemos apuntar en síntesis algunos elementos en común en sus narrativas, como son la preocupación por una modernidad que no respeta la tradición, la persistencia de valores tradicionales en la familia y en comunidades que impiden el desarrollo individual de sus miembros, y la existencia de prejuicios que actúan como un lastre para la consolidación y aceptación de otras identidades. Igualmente se aprecia la preocupación de los cineastas turcos en dar voz a una parte de la sociedad hasta ahora silenciada, reflexionando sobre asuntos que simplemente no se cuestionaban. En definitiva, nos encontramos ante un cine comprometido con su presente, un cine valiente que lucha por salir del interior del cascarón al que ha sido confinado durante mucho tiempo.

Críticas y reseñas

  • Aíta

    dir: José María de Orbe

    crítica
  • Aíta. Carta al hijo

    dir: José María de Orbe

    crítica
  • El lugar más pequeño

    dir: Tatiana Huezo

    crítica
  • El premio

    dir: Paula Markovitch

    crítica
  • Mercado de futuros

    dir: Mercedes Álvarez

    crítica
  • Oyun

    dir: Pelin Esmer

    crítica